Existen varios “mecanismos de defensa” en el tumor que buscan engañar al sistema inmunológico para evitar su identificación y destrucción. La inmunoterapia busca descifrar estos mecanismos y exponer nuevamente a la enfermedad para el ataque de su propio sistema inmune.

«Son muy útiles, pero no en todos los pacientes; por ejemplo en cáncer de pulmón se observan respuestas de entre un 20% y 30%, pero en quienes funciona lo hace muy bien y por mucho tiempo», No es posible administrarla como si fuera un milagro o la cura definitiva contra el cáncer. Fuente: El español, entrevista a científicos

Por el momento, existen aprobaciones para el melanoma avanzado y el cáncer de pulmón y de mama triple negativo, pero son muchos los tumores sólidos en los que se está mostrando como una estrategia prometedora. El cáncer renal y el ginecológico parecen ser otros tipos tumorales con gran afinidad a este tratamiento. Las indicaciones crecen a diario según se confirman con nuevos estudios.  

Los fármacos se administran por vía intravenosa y en un servicio con experiencia en el manejo de medicamentos especiales y bajo vigilancia de un oncólogo con experiencia.

Los expertos dudan de que la inmunoterapia vaya a tomar el relevo de la quimioterapia, aunque destacan las ventajas sobre la misma. Antes de poder decir adiós a la clásica “quimio”, se prevé un periodo de convivencia de ambas terapias que podrían incluso combinarse, como ya se ha hecho en algunos ensayos clínicos.